lunes, 19 de mayo de 2008

La uve es una copa si pie. Una punta de flecha huérfana de madre. O de padre, si aludimos al tronco, mástil, palo...
La uve no aja, porque está su vértice apoyado, clavado, enterrado.
La uve no aja, pero si uve por nombre propio.
La uve no aja porque ajoplanta ageometriza los destriangulos apiñados sin dulzor de piña desapiñada.
La uve en el agua es un signo uvedecido.
La uve se necesita para ver y no quedarnos en er. Así es vista más que lista, por uve, primera de lista en la palabra dicha.
La uve vence, vende, vive, vibra, va, viene, vuela, vuelve, veloz, volátil...
La uve es una Y sin cola. Inclinadas piernas bajo cuya sombra se guarecen las vocales pintadas.

No hay comentarios: